Definición de Hardiness
Hardiness es un rasgo de personalidad que se asocia con la capacidad de una persona para manejar y responder a los eventos estresantes de la vida con estrategias de afrontamiento que convierten las circunstancias potencialmente desafortunadas en oportunidades de aprendizaje. Se caracteriza por la tendencia a involucrarse profundamente, la necesidad de tener el control y el deseo de aprender de los acontecimientos de la vida, independientemente de los resultados.
Historia de la rusticidad y las actitudes de rusticidad
Con más de 20 años de teoría, investigación y práctica, la rusticidad es un concepto bien establecido en psicología. El concepto psicológico de dureza se identificó por primera vez al examinar las reacciones de estrés entre los directivos de la compañía Illinois Bell durante un período de 12 años. A los seis años del estudio, se produjo un importante trastorno corporativo en su empresa matriz, lo que provocó una disminución de la mitad de la plantilla durante un período de un año. Durante los años siguientes, dos tercios de los directivos mostraron signos de reacción al estrés (por ejemplo, ataques al corazón, depresión, suicidio, divorcio), mientras que un tercio de los directivos prosperó en esas condiciones de estrés. ¿Cuál fue la diferencia entre los que sucumbieron al estrés y los que prosperaron? Los directivos que mostraban las tres actitudes de compromiso, control y desafío estaban protegidos contra las enfermedades relacionadas con el estrés. La combinación única de estas tres actitudes se conoció como las 3C de la resistencia.
Poseer las tres actitudes de resistencia proporciona a las personas la capacidad de convertir las circunstancias desafortunadas en oportunidades de crecimiento personal. Las 3C se describen como (1) la tendencia a involucrarse profundamente en todos los aspectos de la vida: personas, lugares y eventos (compromiso); (2) la creencia en la propia capacidad de influir en los resultados de la vida (control); y (3) el deseo de aprender continuamente de las experiencias positivas y negativas y de aceptar el cambio (desafío). La teoría de la dureza enfatiza que una persona debe poseer estas tres actitudes para tener valor existencial (es decir, valor basado en la experiencia).
El modelo de dureza
Poco después de la agitación corporativa, los resultados de la investigación se utilizaron para desarrollar un programa de formación para ayudar a los directivos de la compañía Illinois Bell. A partir de este programa de formación y de la investigación previa, surgió un modelo de resistencia. Este modelo muestra que, a medida que aumentan las circunstancias estresantes, es probable que se produzca una reacción de tensión. Si esta reacción de tensión continúa acumulándose, se espera que se produzcan déficits de rendimiento (por ejemplo, enfermedad física o colapso mental). Sin embargo, si las actitudes resistentes son fuertes, la consecuencia es un afrontamiento resistente.
Por lo tanto, las personas resistentes utilizan estrategias de afrontamiento activas en lugar de pasivas y es menos probable que eviten afrontar los acontecimientos estresantes. Las actitudes hardy también motivan el afrontamiento hardy, el apoyo social hardy (es decir, proporcionar y recibir apoyo social) y las prácticas de salud hardy (por ejemplo, la práctica de técnicas de relajación y el ejercicio). Si una persona reflexiona activamente sobre cada situación, las actitudes resistentes pueden profundizar, conduciendo a reacciones resistentes similares en nuevas situaciones.