Una de cada cuatro personas con cáncer también sufre depresión. Aquí le explicamos cómo detectar los signos en usted mismo o en un ser querido, y qué hacer al respecto.
Independientemente de su edad, etapa de la vida o circunstancias, un diagnóstico de cáncer suele cambiar su perspectiva de la vida y su enfoque de la salud y el bienestar.
Vivir con cáncer puede traer consigo un cambio abrumador en el bienestar físico, emocional y mental. Un diagnóstico de cáncer afecta al cuerpo de forma negativa, difícil y a menudo dolorosa.
Lo mismo puede ocurrir con los tratamientos y terapias contra el cáncer -ya sea la cirugía, la quimioterapia o el reemplazo hormonal-, que pueden provocar síntomas adicionales de debilidad, fatiga, pensamiento nublado o náuseas.
Cuando una persona con cáncer se esfuerza por gestionar el importante impacto que la enfermedad y el tratamiento tienen en su cuerpo, también se enfrenta al posible impacto en su bienestar mental.
El cáncer conlleva una enorme cantidad de peso emocional, y a veces se manifiesta a través del miedo, la ansiedad y el estrés.
Estas emociones y sentimientos pueden empezar siendo pequeños y manejables, pero a medida que pasa el tiempo, pueden llegar a ser más consumidos y complicados de sobrellevar – conduciendo finalmente en algunos casos a la depresión clínica.
Aquí se explica cómo detectar los signos de la depresión y la ansiedad, y qué hacer cuando los vea en usted mismo o en un ser querido.
Depresión y cáncer
La depresión es bastante común en las personas que viven con cáncer. Según la Sociedad Americana del Cáncer, aproximadamente 1 de cada 4 personas con cáncer tiene depresión clínica.
Los síntomas pueden incluir:
- sentimientos de tristeza, vacío o desesperanza
- pérdida de interés o placer por las cosas
- dificultades para pensar o concentrarse
- altos niveles de fatiga, cansancio y agotamiento
- lentitud de pensamiento, movimientos o habla
- náuseas, dolores de estómago o problemas digestivos
- cambios en el estado de ánimo, incluyendo agitación o inquietud
- alteraciones del sueño, incluyendo insomnio o sueño excesivo
Esta lista de síntomas de depresión puede solaparse con los efectos secundarios del cáncer y de los tratamientos oncológicos.
Debe tenerse en cuenta que la depresión es generalmente más duradera, más intensa y más penetrante que los sentimientos temporales de tristeza. Si estos sentimientos están presentes durante más de dos semanas, podría ser probable que usted, o un ser querido con cáncer, pueda estar experimentando una depresión.
Prevención del suicidio
- Si cree que alguien está en riesgo inmediato de autolesionarse o de hacer daño a otra persona:
- – Llame al 911 o a su número local de emergencias.
- – Quédese con la persona hasta que llegue la ayuda.
- – Retire las armas, cuchillos, medicamentos u otras cosas que puedan causar daño.
- – Escuche, pero no juzgue, discuta, amenace o grite.
- Si usted o alguien que conoce está pensando en suicidarse, obtenga ayuda de una línea telefónica de crisis o de prevención del suicidio. Pruebe la Línea Nacional de Prevención del Suicidio en el 800-273-8255.
La ansiedad y el cáncer
La ansiedad también puede manifestarse en las personas con cáncer, y puede presentarse como leve, moderada, intensa o con variaciones intermedias.
Los síntomas comunes de ansiedad pueden incluir:
- preocupación excesiva e intensa
- sentimientos de inquietud e irritabilidad
- dificultades para concentrarse o enfocar
- estar físicamente tenso e incapaz de sentirse a gusto
Las personas que viven con cáncer pueden pasar cantidades considerables de tiempo preocupándose por su futuro, su familia, su carrera o sus finanzas. Esta ansiedad puede consumir numerosos aspectos de su vida y disminuir su capacidad de funcionamiento.
Los períodos intensos de ansiedad pueden convertirse en ataques de pánico. Los ataques de pánico son periodos de gran ansiedad que suelen durar menos de 10 minutos (aunque algunas personas afirman que sus ataques de pánico duran más tiempo).
Los signos de un ataque de pánico pueden incluir:
- un aumento del ritmo cardíaco
- dificultad para respirar
- sensación de entumecimiento, mareo y aturdimiento
- focos de calor o sudores fríos
Consejos para afrontar el cáncer, la ansiedad y la depresión
Para alguien que ya está luchando contra el cáncer, el reto añadido de enfrentarse a la depresión o la ansiedad puede parecer desalentador. Prestar atención a su salud mental le dejará más recursos para cuidar también de su salud física.
Al iniciar el proceso de gestión de su salud mental, es importante evitar las habilidades de afrontamiento negativas, ser honesto y abierto con los que le rodean y buscar ayuda.
Lo que no hay que hacer:
- No evite el problema y espere que desaparezca. Los niveles más altos de ansiedad rara vez se alivian sin afrontar el problema en cuestión.
- No engañes a los demás diciéndoles que estás bien. No es justo ni para ti ni para ellos. Está bien hablar y hacer saber a los demás que no estás bien.
- No confíes en el alcohol u otras sustancias para reducir la depresión y la ansiedad. Lo más probable es que la automedicación no mejore los síntomas, e incluso puede añadir más problemas.
Qué hacer:
- Acepta tus sentimientos y comportamientos. Lo que siente, piensa o hace no está mal. Ser diagnosticado de cáncer puede ser un momento difícil para cualquiera. Dé un paso atrás para observar y aceptar estos sentimientos antes de intentar cambiarlos.
- Hable con sus seres queridos o con un terapeuta sobre sus pensamientos y sentimientos. Enfrentarse a la depresión y la ansiedad puede ser abrumador para uno mismo. Hablar con las personas en las que confía le ayudará a procesar, aceptar o incluso validar sus sentimientos y le proporcionará formas de afrontarlos.
- Concéntrese en su salud física. Cuando la salud comienza a quebrarse, algunas personas dejan de atender sus necesidades físicas por frustración. Sin embargo, ahora es el momento de comer bien, descansar lo suficiente y hacer el mejor ejercicio posible durante el diagnóstico y el tratamiento.
El cáncer afecta a la salud física y mental.
Entendiendo el impacto global, reconociendo que no estás solo, y teniendo acceso a ayuda y apoyo, puedes luchar contra el cáncer en ambos frentes.
NewLifeOutlook tiene como objetivo empoderar a las personas que viven con condiciones crónicas de salud mental y física, animándoles a adoptar una perspectiva positiva. Sus artículos ofrecen consejos prácticos de personas que tienen experiencia de primera mano con las enfermedades crónicas.