El estreñimiento en los niños puede ser un motivo de preocupación para los padres. Si bien no suele causar consecuencias graves, las incomodidades que produce en el menor son razones suficientes para alarmarse. ¿Qué se puede hacer para acelerar su alivio?
Teniendo en cuenta que la recomendación general es siempre acudir antes al pediatra para explorar a qué se debe, hay algunos remedios caseros que pueden ayudar a mejorar sus síntomas y a reducir la necesidad de utilizar laxantes sintéticos o productos desagradables para el infante.
¿Qué tal si los tenemos en cuenta a partir de ahora?
Sencillos remedios para controlar el estreñimiento en los niños
El estreñimiento es un problema muy común en los niños y bebés, ya que los movimientos del intestino y la relajación del esfínter aún no han madurado lo suficiente. Por eso, antes de recurrir a laxantes o medicamentos, se recomienda acudir al pediatra para valorar la posibilidad de introducir cambios en el estilo de vida.
Los remedios básicamente consisten en aumentar el aporte de fibra, agua y otros elementos claves para la digestión. Así lo afirma un estudio publicado en el año 2019. Además, hay que poner en marcha sencillas estrategias que inciden en la prevención de los problemas intestinales.
Cuidado con el azúcar
Una estrategia común que siguen muchas madres cuando sus hijos tienen problemas para ir al baño, es darles mermeladas de frutas. Hay que tener cuidado con esto:
- Tanto las mermeladas como los jugos suelen tener cierto porcentaje de azúcar que los niños no sintetizan bien y que ocasionan problemas intestinales.
- También es interesante saber que para los niños pequeños (los menores de 2 años) la mermelada de ciruela es un «poco fuerte», pueden aparecer gases, así que siempre será más indicado sustituirla por pera, que es más suave y se digiere mejor.
- Procura hacer tú misma las mermeladas para que sea fruta 100%. Y recuerda que siempre será mejor fruta natural antes que jugos. De este modo el niño aprovecha mejor la fibra presente en la fruta.
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Uvas en ayunas
Son estupendas, se digieren bien, son sabrosas y un remedio muy frecuente para aliviar el estreñimiento en los niños. Además, contienen nutrientes con propiedades antioxidantes para ayudarles a mantenerse sanos.
- Sería perfecto que nada más levantarse se comieran de entre 6 y 8 uvas, con piel incluida. Deben masticarla bien. Unos 30 minutos después, puedes darles su desayuno de siempre.
Más fibra
Para combatir el estreñimiento en los niños, es ideal que les des granos enteros. Incluye, por ejemplo, unos buenos cereales integrales sin azúcar en su desayuno y procura que el pan que coman no contenga excesivas harinas refinadas.
- Puedes prepararles un buen tazón con trocitos de fresa, pera, kiwi, nueces y algunos trazos pequeños de chocolate sin azúcar para que sus desayunos sean así más sanos y divertidos. De este modo obtienen fibra en las siempre saludables frutas.
- Cabe indicarte también que, en el caso de los niños, la cantidad de fibra recomendada es su edad más 5. Es decir, si tu hijo tiene 4 años, la cantidad ideal sería 9 gramos de fibra al día.
Ten en cuenta que el consumo habitual de esta sustancia ha demostrado ser esencial de cara a prevenir el estreñimiento. Incrementa la motilidad intestinal y origina cambios positivos en la microbiota.
Evitar determinados alimentos
A los niños les suelen encantar los dulces, los pasteles, las bollerías y similares. Sin embargo, es necesario que desde bien pequeños les orientemos en la necesidad de comer saludablemente.
- Ten en cuenta que la leche con mucha nata, el queso, los helados, el arroz blanco o el pan blanco de molde no se digieren muy bien en los organismos de los niños.
Incrementar el agua
Lo sabemos. A los niños les suele costar mucho beber agua, pero es necesario que estén siempre bien hidratados para que sus órganos puedan funcionar con normalidad. Ahora bien, ¿de qué manera podemos conseguir que los niños beban un poco más de agua?
- Compra botellitas divertidas, intenta que el envase les atraiga, para que así se animen a beber agua. Tampoco te olvides del clásico truco de las gotitas de jugo de limón: de ese modo el agua deja de ser tan aburrida.
No olvides que la ingesta de líquido ayuda a lubricar el bolo fecal y a reducir el estreñimiento en los niños. Así lo evidencia una investigación publicada en Jornal de Pediatria.
Un baño de agua caliente y un masaje con aceite de oliva
Un viejo truco ampliamente extendido. Cuando tus hijos sufran de estreñimiento, dales un baño con agua caliente (soportable para su piel) y permite que se relajen unos 15 minutos.
Después, dales un masaje circular en el abdomen con unas gotitas de aceite de oliva. Se sentirán más relajados y facilitaremos el tránsito intestinal.
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Alejarlos de estrés
Hay un importante aspecto que nunca debemos pasar por alto: los niños exteriorizan sus problemas muchas veces a través de este tipo de procesos.
Por ejemplo, si les hemos regañado recientemente por mojar la cama, o les hemos exigido demasiado en su comportamiento, es frecuente que somaticen este estrés con el control del esfínter. Lo retienen por ansiedad o por nervios.
Habla con tu hijo, ofrécele confianza y apoyo, puesto que, muchas veces, el estreñimiento en los niños suele tener un origen emocional.
Cambia los hábitos para reducir el estreñimiento
Como has visto, es necesario promocionar buenos hábitos dietéticos para evitar o tratar el estreñimiento en niños. Aunque puede resultar un problema molesto, la solución muchas veces es sencilla, solo hay que dar con la tecla correcta.