La contractura de Dupuytren es una enfermedad que afecta a la mano y los dedos, y que puede dejar al paciente sin poder enderezar los dedos. El experimentado cirujano ortopédico Andrew Fitzgerald lo explica.
La contractura de Dupuytren, o fibromatosis palmar, es una afección de la mano que hace que los dedos queden fijados en una posición doblada. La capa de tejido bajo la piel de la palma de la mano (la fascia palmar) desarrolla pequeños nódulos duros, que se van engrosando progresivamente. Con el tiempo, esto da lugar a cordones o bandas de tejido engrosado que se extienden hacia los dedos, lo que puede hacer que se doblen hacia dentro de la palma. Cada vez es más difícil enderezarlos, y los pacientes de larga duración suelen tener los dedos permanentemente doblados.
Aunque la enfermedad no suele ser dolorosa, esta contractura en flexión de los dedos puede dificultar la vida cotidiana. Acciones sencillas como meter las manos en los bolsillos, ponerse guantes, lavarse la cara o dar la mano a alguien pueden resultar difíciles de realizar. Puede haber cierta incomodidad al sujetar o agarrar.
La contractura de Dupuytren suele afectar a una mano más severamente que a la otra, pero puede afectar a ambas por igual. Suele afectar a los dedos anular y meñique, aunque puede afectar a cualquier dígito.
Una afección similar conocida como fibromatosis plantar puede producirse en la planta del pie, con la formación de nódulos en la parte medial del arco.
¿Cuáles son las causas de la contractura de Dupuytren?
No se sabe con exactitud cuál es la causa de la contractura de Dupuytren, pero hay ciertos factores que aumentan el riesgo, como ser varón, tener más de 50 años y ser descendiente de europeos del norte.
¿Por qué la contractura de Dupuytren se llama enfermedad vikinga?
La enfermedad de Dupuytren ha recibido el apodo de «la enfermedad vikinga» debido a su prevalencia en el norte de Europa y en los descendientes de europeos del norte. Según la tradición, la enfermedad era común entre los vikingos, que conquistaron y asaltaron gran parte del norte de Europa, propagando la enfermedad entre las poblaciones con las que se casaron.
¿Se puede curar la contractura de Dupuytren?
Los casos leves suelen controlarse hasta que la enfermedad progresa hasta un punto en el que es necesario intervenir.
Esta intervención puede adoptar la forma de inyecciones de colagenasa en el tejido afectado por la Dupuytren. Esto ayuda a romper las bandas de tejido engrosado, que luego pueden estirarse, liberando la contractura.
También hay un procedimiento llamado fasciotomía con aguja, que utiliza una aguja para cortar y liberar las bandas.
Por último, la cirugía de la contractura de Dupuytren (fasciectomía de Dupuytren) implica una incisión en la mano para dividir y eliminar el tejido engrosado en las palmas y los dedos, lo que permite enderezarlos. Puede realizarse con anestesia local o general, normalmente en un día. Los puntos de sutura suelen retirarse entre 10 y 14 días después, y se recomienda acudir a un terapeuta de manos lo antes posible para ayudar a reducir la hinchazón y trabajar en la recuperación del movimiento. Es posible que el paciente tenga que llevar una férula por la noche durante 4-6 meses después de la operación.