Desde hace siglos, está muy extendida la creencia de que el miedo o el temor pueden hacer que el pelo se vuelva blanco. «Dicen» que el pelo de algunos condenados (como María Antonieta) se volvió blanco la noche antes de sus ejecuciones. Curiosamente, no hay informes modernos de condenados a muerte de que esto ocurra. Las historias de fantasmas también describen a menudo a personas cuyos encuentros con espíritus les dejaron el pelo blanco.

Es material de leyenda, folclore y mito universal. Pero, ¿es cierto?

De hecho, es médicamente imposible; no existe ningún mecanismo por el que el cabello pueda volverse orgánicamente blanco, ni de repente ni de la noche a la mañana. A pesar de las sugerencias de los fabricantes de que ciertos productos pueden devolver la vida al cabello, éste siempre está muerto. Una vez que el cabello sale de la cabeza, no puede ser influenciado por ningún proceso psicológico o fisiológico del cuerpo (incluyendo sustos o choques).

Incluso si una enfermedad, una lesión o un choque repentino pudieran volver el cabello blanco, pasarían semanas antes de que el efecto fuera visible porque sólo la raíz se vería afectada. Se puede ver este mismo principio cuando una persona se hiere una uña cerca de la cutícula, y la parte dañada crece gradualmente. No es posible que todo el tallo del cabello se vuelva blanco de forma espontánea, como tampoco lo es que de una rama de árbol muerta broten hojas. Las canas podrían parecer blancas si los cabellos coloreados se cayeran selectivamente por alguna razón (por ejemplo, la alopecia), dejando atrás los cabellos blancos.

Siga Los Pequeños Misterios de la Vida en Twitter @llmysteries. También estamos en Facebook & Google+.

Noticias recientes

{{ articleName }}

.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.