Molusco contagioso

(Molluscum Contagiosum)

A pesar de que el molusco contagioso es una erupción habitual en los niños, hay muchos padres que nunca han oído hablar sobre él. Lo más importante de todo es que en la mayoría de los niños el molusco contagioso es un problema sin importancia que se cura solo, con el paso del tiempo.

Sobre el molusco contagioso

El molusco contagioso es una infección viral que cursa con una leve erupción en la piel. La erupción consta de uno o más bultitos o crecimientos de tamaño reducido con un aspecto similar al de las verrugas (denominados moluscos) que suelen ser rosas, blancos o del color de la piel. Los bultitos suelen ser blandos y suaves al tacto y muchos de ellos son umbilicados, es decir, tienen la parte central hendida.

Esta infección es más frecuentes en los niños de entre 1 y 12 años de edad, pero también ocurre en:

  • adolescentes y adultos
  • algunos atletas, como los que practica la lucha libre, la natación y la gimnasia
  • gente cuyos sistemas inmunitarios se han visto debilitados por el VIH, el tratamiento contra el cáncer o el uso prolongado de medicamentos esteroideos

Como usted ya habrá anticipado teniendo en cuenta su nombre, se trata de un trastorno de la piel que es contagioso; es decir, que se puede extender por el cuerpo de quien lo padece y que se puede «pegar» a otras personas. No se sabe durante cuánto tiempo se puede contagiar la erupción ni el virus.

Causas

El molusco contagioso está causado por el virus del molusco contagioso (VMC), miembro de la familia de los poxvirus. Se trata de un virus que se reproduce en climas cálidos y húmedos y en áreas donde la gente vive muy pegada.

Las infecciones por el virus del molusco contagioso ocurren cuando el virus entra en el organismo a través de una pequeña abertura en la superficie de la piel. Mucha gente que entra en contacto con el virus se inmuniza contra él, de modo que no volverá a desarrollar protuberancias cuando vuelva a entrar en contacto con él. En aquellas personas que no sean inmunes, las protuberancias suelen aparecer entre 2 y 8 semanas después de que hayan contraído la infección.

Los niños pueden contraer esta infección de varias formas diferentes. Se contagia con facilidad, generalmente a través del contacto directo piel con piel, pero los niños también la pueden contraer tocando objetos que han entrado en contacto con el virus, como juguetes, ropa de vestir, toallas y ropa de cama. También la pueden contraer a través de agua infectada por el virus.

Cuando un niño contrae el molusco contagioso, esta infección se puede extender por su cuerpo si el niño se rasca o frota las protuberancias y luego se toca otra parte del cuerpo.

El molusco contagioso también se puede contagiar a través de las relaciones sexuales.

Signos y síntomas

Al tratarse de una infección cutánea, el único signo visible del molusco contagioso es la presencia de pequeñas protuberancias, de forma redonda y del color la piel, rosa o blanco en la superficie de la piel. Estas protuberancias tienen la parte central llena de un pus blanco y ceroso que contiene el virus y es posible que brillen y que tengan un aspecto perlado.

Los moluscos empiezan como granos diminutos, aproximadamente del tamaño de una cabeza de alfiler, y luego crecen a lo largo de varias semanas, convirtiéndose en protuberancias de mayor tamaño que pueden alcanzar el volumen de un guisante grande o el de las gomitas de borrar adosadas al extremo de algunos lápices. A menudo se forma una pequeña hendidura (u hoyuelo) en la parte superior del nódulo, de ahí que se diga que los moluscos son «umbilicados».

Los moluscos pueden aparecer de forma aislada, como una sola protuberancia, o en grupos, racimos o filas. Se pueden dar en casi cualquier parte de la piel, pero en los niños suelen aparecer en el pecho, el estómago, los brazos (incluyendo las axilas), las piernas, la ingle, el área genital y la cara.

En los adolescentes y los adultos que mantengan relaciones sexuales, las protuberancias se suelen localizar en el área genital o en la cara interna de los muslos. En contadas ocasiones, se desarrollan moluscos alrededor de los ojos o de la boca.

La mayoría de la gente desarrolla entre 1 y 20 moluscos. No suelen ser dolorosos, pero pueden empezar a picar, enrojecerse, hincharse, doler e infectarse, sobre todo si la persona afectada se los rasca.

Diagnóstico

El pediatra es probable que reconozca el molusco contagioso a simple vista, observando la erupción. Es posible que envíe al paciente a un dermatólogo, un médico especializado en enfermedades cutáneas.

En contadas ocasiones, el pediatra o el dermatólogo extraerá una muestra de la protuberancia (sea a través de una biopsia o rascando el área de la piel infectada) para observar las células al microscopio y confirmar que se trata de un molusco.

Tratamiento

En muchos casos, los pediatras dejan que el molusco contagioso se cure solo sin aplicar ningún tipo de tratamiento. Cada uno de los moluscos suele desaparecer al cabo de aproximadamente 2 o 3 meses. De todos modos, suelen ir creciendo nuevas protuberancias mientras van despareciendo las iniciales, lo que implica que el molusco contagioso suela tardar en desaparecer por completo entre 6 y 18 meses (pudiendo durar todo el proceso hasta 4 años).

A veces los médicos utilizan tratamientos para eliminar los nódulos o ayudar a que desaparezcan más deprisa, como:

  • extraer el centro contagioso exprimiendo el nódulo con un escalpelo o unas pinzas
  • extirpar las protuberancias congelándolas (crioterapia) o cortándolas con un instrumento afilado (raspado)
  • aplicar un agente químico o crema, como ácido salicílico, tretinoína, cantaridina, peróxido de benzoilo u otros medicamentos contra las verrugas
  • utilizar un medicamento denominado cimetidina por vía oral

Aunque estos tratamientos a veces ayudan a que la enfermedad desaparezca más deprisa, la mayoría de los pediatras no los utilizan porque, aparte de que pueden ser dolorosos, pueden quemar, manchar o dejar ampollas y cicatrices en la piel. El hecho de que un médico o un pediatra decidan tratar el molusco contagioso dependerá de su ubicación y de la cantidad de lesiones. Algunos pacientes solicitan tratamiento si la erupción les resulta embarazosa o si les provoca otros problemas, como picor u otro tipo de molestias.

El tratamiento da mejor resultado cuando se inicia pronto, es decir, cuando solo se ha desarrollado una cantidad reducida de protuberancias. El pediatra de su hijo les explicará las ventajas y los inconvenientes del tratamiento y les ayudará a decidir si es o no necesario. Asegúrese de hablar con el pediatra antes de probar ningún remedio casero, como intentar quitar los moluscos sin ayuda médica.

Complicaciones

El molusco contagioso no suele provocar problemas de larga duración y las protuberancias no suelen dejar marcas. De todos modos, los tratamientos del molusco contagioso pueden dejar cicatrices en la piel, y algunas personas desarrollan infecciones secundarias, que requieren tratamiento antibiótico.

Las personas con el sistema inmunitario debilitado a veces pueden desarrollar una forma más grave de molusco contagioso. Por lo general, suelen presentar una mayor cantidad de lesiones, sobre todo en la cara. Los moluscos crecen más, tiene un aspecto diferente y suelen ser más difíciles de tratar. En estos casos, es posible que el pediatra recete medicamentos para reforzar el sistema inmunitario.

Cómo prevenir la propagación del molusco contagioso

Puesto que el molusco contagioso es muy contagioso y se puede extender a otras partes del cuerpo, una persona infectada debería adoptar las siguientes precauciones:

  • No tocar, rascar ni frotar las lesiones.
  • Lavarse las manos a menudo con agua y jabón.
  • Mantener bien limpias las zonas donde hayan salido moluscos.
  • Intentar cubrirse todos las lesiones con ropa o un vendaje hermético, sobre todo antes de practicar actividades donde se comparta el equipo o donde pueda haber contacto piel con piel, como la natación y la lucha libre.
  • Cambiar todos los vendajes cada día o cuando se ensucien.
  • No afeitarse las áreas con lesiones.
  • Hidratarse la piel si estuviera seca.

Siempre y cuando un niño con molusco contagioso adopte las anteriores precauciones hasta que le desaparezcan todos los moluscos, podrá seguir asistiendo a su guardería o centro de estudios, practicando deporte y jugando con otros niños.

Una persona que ya había contraído el molusco contagioso previamente se podría volver a contagiar si entrara en contacto con una persona infectada. Es algo muy poco frecuente, pero que puede ocurrir.

Para evitar la infección, sus hijos deberían seguir los siguientes consejos:

  • Lavarse las manos a menudo con agua y jabón.
  • No compartir toallas, ropa de vestir ni otros artículos de uso personal.
  • No compartir flotadores, tablas acuáticas ni otros artículos o juguetes que se utilizan en las piscinas.
  • No tocar ni rascar los bultitos o ampollas de la propia piel o de la piel de otras personas.

Revisado por: Patrice Hyde, MD
Fecha de la revisión: abril de 2013

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