La lectura nos permite transportarnos de nuestro propio mundo a otro. Entre las páginas de un libro podemos sumergirnos en la vida de personajes de ficción y conocer una cultura totalmente diferente a la nuestra. También podemos aprender nuevas palabras y frases, experimentar una serie de emociones y adquirir habilidades y conocimientos.

Debido al potencial de aprendizaje, los efectos de la lectura en el desarrollo infantil son amplios y múltiples estudios han destacado sus beneficios. Por ello, los profesores y los padres están en una gran posición para garantizar que la lectura sea una parte fundamental de la rutina diaria de los niños. Le daremos más información sobre por qué es tan importante y le daremos algunos consejos que puede utilizar tanto dentro como fuera del aula.

¿Cuáles son los beneficios de la lectura para los niños?

No se puede subestimar la importancia de la lectura para los niños. Leer por placer puede ser beneficioso para la educación, el desarrollo social y cognitivo, el bienestar y la salud mental del niño.

¿Cuáles son los efectos de la lectura en el desarrollo infantil?

Numerosas investigaciones realizadas y encargadas por BookTrust han descubierto los profundos beneficios de la lectura para el desarrollo del niño. Un estudio detalla los efectos de la lectura en las habilidades posteriores de alfabetización, facilitando la interacción social entre adultos y niños, y animando a los niños a comprometerse con el mundo que les rodea. También señala cómo la lectura puede ser una «fuente de información estable» a lo largo de la vida del niño. Esta estabilidad les permite acceder al texto de manera constante y puede ser especialmente beneficiosa para los niños que crecen en circunstancias difíciles.

Hay otros múltiples beneficios que la lectura puede tener en el desarrollo de un niño, incluyendo:

Asistencia al desarrollo cognitivo. El desarrollo cognitivo se refiere a cómo percibimos y pensamos sobre nuestro mundo en referencia a nuestra inteligencia, razonamiento, desarrollo del lenguaje y procesamiento de la información. Al leer a los niños, se les proporciona una comprensión profunda de su mundo y se les llena el cerebro de conocimientos previos. A continuación, utilizan estos conocimientos previos adquiridos para dar sentido a lo que ven, oyen y leen, lo que contribuye a su desarrollo cognitivo.

Desarrollar la empatía. Cuando leemos un libro, nos ponemos en la historia que tenemos delante. Esto nos permite desarrollar la empatía, ya que experimentamos la vida de otros personajes y podemos identificarnos con lo que sienten. Los niños pueden utilizar esta comprensión para empatizar en el mundo real con otras personas. Además, los niños adquieren una mayor comprensión de las emociones, lo que puede ayudarles a entender sus propias emociones y las de los demás. Esto ayuda enormemente a su desarrollo social.

Conseguir una comprensión más profunda. Un libro puede llevarnos a cualquier parte: a otra ciudad, a otro país o incluso a un mundo alternativo. Al leer un libro, un niño aprende sobre personas, lugares y acontecimientos que no podría aprender de otra manera. De este modo, los niños adquieren una comprensión más profunda del mundo que les rodea y de las culturas diferentes a la suya.

Construir relaciones más sólidas. Si un padre lee con su hijo de forma regular, sin duda desarrollará una relación más fuerte con él. La lectura proporciona a los padres la oportunidad de tener un evento regular y compartido que tanto el padre como el niño pueden esperar. Además, proporciona a los niños sentimientos de atención, amor y seguridad, lo cual es clave para la crianza y el bienestar.

¿Cuál es la importancia de los cuentos en la educación infantil?

Leer con los niños puede ayudar a crear un amor por la lectura para toda la vida. Múltiples estudios han encontrado una correlación entre la lectura por placer y un mayor rendimiento académico en todas las asignaturas, no sólo en inglés.

Los beneficios de leer con los niños en su educación son amplios:

Mejora de las habilidades literarias. Leer en voz alta con los niños pequeños, aunque no puedan entender del todo lo que se dice, les proporciona las habilidades que necesitan para cuando empiecen a leer por sí mismos. Muestra a los niños que la lectura es algo que se consigue enfocando de izquierda a derecha y que pasar páginas es esencial para continuar. Leer a los niños, incluso en los primeros meses de su vida, puede contribuir a la adquisición del lenguaje y a estimular la parte del cerebro que lo procesa.

Un vocabulario más amplio. Escuchar palabras pronunciadas en voz alta puede exponer a los niños a una serie de vocabulario y frases nuevas que de otro modo no habrían escuchado. Al leerle a un niño a diario, aprenderá nuevas palabras cada día.

Mayor concentración. La lectura regular y constante puede ayudar a mejorar la capacidad de concentración del niño. Además, ayudará a que el niño aprenda a quedarse quieto y a escuchar durante largos periodos de tiempo, lo que le beneficiará en su escolarización.

Mayores niveles de creatividad e imaginación. La lectura de un libro depende de que utilicemos nuestra imaginación para imaginarnos los personajes, visualizar sus escenarios y su entorno, y adivinar lo que vendrá después. Debemos utilizar nuestra imaginación si queremos conocer otras personas, lugares, acontecimientos y épocas. A su vez, el desarrollo de la imaginación conduce a una mayor creatividad, ya que los niños utilizan las ideas que tienen en la cabeza para realizar su trabajo.

Por último, cuanto más se le lea a un niño y cuanto más lea él mismo, mejor lo hará. La práctica realmente hace la perfección y, cuanto más lea un niño, mejor será su rendimiento académico general y sus habilidades sociales, como la empatía.

Los diez principales beneficios de la lectura para los niños

En base a lo que hemos comentado anteriormente, estos son los diez principales beneficios de la lectura para los niños:

  1. Su vocabulario es más amplio y extenso.
  2. Su rendimiento académico es mejor.
  3. Su imaginación puede volar.
  4. Sus habilidades de creatividad se desarrollan.
  5. Desarrollan la empatía.
  6. Adquieren una comprensión más profunda de su mundo.
  7. Sus niveles de concentración mejoran.
  8. El vínculo entre padres e hijos mejora.
  9. Su desarrollo cognitivo se ve favorecido.
  10. Sus habilidades sociales y su interacción mejoran.

Cómo leer con su hijo

Leer en voz alta es una actividad agradable que pueden disfrutar tanto los padres como los niños. Además, es una actividad que los profesores encuentran satisfactoria y que deberían fomentar con regularidad, tanto en la escuela como en casa.

Cómo pueden los padres leer con sus hijos

Si usted lee con su hijo en casa, está complementando lo que aprende en el aula, además de darle un apoyo individualizado adicional que el aula no puede ofrecer. Para que las sesiones de lectura sean exitosas y eficaces, tenga en cuenta lo siguiente:

Empiece de joven. Incluso durante la infancia, un niño puede mirar las imágenes y escuchar su voz. Lea en voz alta a su hijo y señale los dibujos de la página, diciendo el nombre de los objetos que aparecen. Esto proporciona a tu hijo dos fuentes de información: la comprensión de los objetos del mundo real y la comprensión de la importancia del lenguaje. Incluso cuando su hijo pueda leer por sí mismo, deberían leer juntos en voz alta para practicar.

Hágalo parte de su rutina. Haga todo lo posible por leerle a su hijo todos los días y manténgalo constante. Incorpórelo a su rutina diaria y a la de su hijo hasta que se convierta en un hábito como lavarse los dientes. Sin embargo, no se desanime si se salta un día: retome la rutina con normalidad cuando tenga tiempo.

Fomente la variación. Intenta variar los libros que le lees a tu hijo en la medida de lo posible. Esto le abrirá los ojos a una serie de mundos, culturas y personajes diferentes, y permitirá que su imaginación se amplíe y prospere.

Tenga paciencia. A veces podemos olvidar lo que es tener esa edad y cómo éramos nosotros. Como adultos damos por sentado que la lectura es algo normal, pero es más fácil tener paciencia con un niño cuando recordamos lo mucho que aún no sabe. Por ejemplo, ¿cómo va a saber un niño que debe leer de izquierda a derecha hasta que le señalas las palabras a medida que avanza? ¿Cómo va a saber que cada garabato de la página representa una palabra? Tómate tu tiempo y ten paciencia si no lo entienden.

Continúa la conversación. Una vez que hayas terminado de leer un cuento a tu hijo, considera la posibilidad de continuar con él. Dependiendo de la edad, podría hacerles preguntas sobre lo que acaban de leer. Por ejemplo: «¿Te ha gustado el cuento?», «¿Quién era tu personaje favorito?» o «¿Por qué crees que el príncipe era feliz al final?». Sin embargo, no creas que esto es necesario para cada uno de los cuentos que lees. Si su hijo disfruta con el libro, desarrollará el amor por la lectura de todos modos, incluso sin la conversación.

Cómo pueden los profesores fomentar la lectura

Si es usted profesor, es probable que leer a su clase sea algo natural. Sin embargo, puede haber ciertos niños en su clase que sólo tienen la oportunidad de leer en la escuela y no en casa. Esto puede deberse a diversas razones, sin embargo, intente comunicar a los padres la importancia de leer con su hijo. Para ello, podría:

Emitir un boletín informativo. Podría crear un boletín quincenal/mensual en el que se detalle lo que su clase ha leído en esa quincena o mes y por qué. A continuación, diga cómo pueden los padres continuar con el tema de lectura elegido en casa. Por ejemplo, si esa quincena has estudiado ciencia ficción en tu clase, podrías incluir algunas sugerencias de otros libros de ciencia ficción que los padres puedan leer en casa.

Inicia un club de lectura. Si tienes tiempo, puedes crear un club de lectura con tu clase o con toda la escuela. Como parte de este club, podría sugerir un libro por semana, o por mes, que los niños tengan que leer en casa. Después, compruebe su comprensión y compromiso con ese libro celebrando reuniones periódicas.

Haga que los niños participen. Haga saber a sus alumnos que la lectura es valiosa y divertida. Pida a su clase que haga carteles que animen a los demás a leer o cree un expositor donde cada alumno pueda escribir cuál es su libro favorito y por qué. Hacerlo ayudará a fomentar en ellos el amor por la lectura que les haga querer leer en casa.

Predica con el ejemplo. Haga saber a sus alumnos que usted lee y que disfruta con ello. Hábleles de un libro que haya leído recientemente o de su libro favorito de siempre. También puede leer un libro usted mismo cuando sus alumnos tengan un tiempo de lectura silenciosa. Esto ayudará a motivar a tus alumnos para que lean ellos mismos. Por último, comunique esto a los padres y pídales que hagan algo similar en casa.

La lectura es una actividad poderosa, satisfactoria y gratificante. Un libro no sólo es un consuelo y un amigo, sino que también actúa como un maestro y puede enseñar a los niños todo sobre ellos mismos, su mundo y las culturas que hay en él. Leer con los niños tiene numerosos beneficios y es algo que todos los padres y profesores deberían fomentar.

Qué leer a continuación:

  • ¿Qué es el cuestionamiento eficaz y por qué debería utilizarlo en mi aula?
  • Promover el desarrollo social de los niños mediante el juego estructurado en grupo
  • Cursos de formación en educación

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EducaciónProfesores y padres

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