Consejos para convertir su colección de monedas en una inversión lucrativa
Muchas personas de todas las edades y procedencias disfrutan del coleccionismo de monedas como una forma divertida y emocionante de ver diferentes piezas de arte numismático, comprometerse con diferentes períodos de la historia, por no mencionar el reto de encontrar monedas difíciles de conseguir.
Sin embargo, los numismáticos de todo el mundo también deben ser conscientes de que el coleccionismo de monedas puede ser una empresa muy rentable cuando se hace de la manera correcta.
Aquí tiene lo que necesita saber para dedicarse a la numismática, tanto como un pasatiempo divertido como un modo sólido de inversión.
¿Qué da valor a las monedas?
Las monedas obtienen su valor de dos fuentes principales. La primera es el metal físico que contiene la moneda, lo que también se conoce como su valor en lingotes. Dado que muchas monedas de colección están fabricadas con metales preciosos como el oro o la plata, tienen un cierto valor intrínseco como reservas de estos metales. El valor en lingotes de una moneda puede calcularse fácilmente multiplicando el número de onzas de metal que contiene por el precio al contado de ese metal en un momento dado.
La segunda fuente de valor de una moneda es su valor numismático o de coleccionista. Este factor se aplica sobre todo a las monedas antiguas y raras, y es bastante más difícil de determinar que el valor de los lingotes. En última instancia, el valor de coleccionista de una moneda depende del sentimiento del comprador, pero hay algunas pautas. Cuanto menos ejemplares de una moneda se hayan acuñado, por ejemplo, mayor será su valor de coleccionista debido a la escasez de oferta.
El estado de una moneda también desempeña un papel importante en el valor de coleccionista, ya que los compradores que valoran las monedas por su atractivo numismático tienden a pagar sumas mucho mayores por las monedas que están casi sin circular que por las que, obviamente, han tenido un uso regular.
Lea más: The Collector’s Guide to Coin Grading and Certification
Cómo iniciar su cartera de monedas
Cuando se empieza a coleccionar monedas, lo mejor es centrarse inicialmente en el valor de los lingotes. Aunque invertir en monedas raras puede ser muy rentable, es más difícil calibrar cómo será el mercado de coleccionistas de una determinada moneda dentro de cinco o diez años. Invertir en monedas de lingotes modernas, como las monedas de plata de la hoja de arce canadiense y las águilas de oro americanas, es una buena manera de empezar. Todas estas monedas contienen oro o plata de alta calidad, lo que las convierte en excelentes inversiones en metales preciosos. Al mismo tiempo, también son monedas atractivas, lo cual es un factor importante para cualquier coleccionista de monedas.
Algunas monedas más antiguas también pueden ser buenos almacenes de valor de lingotes, aunque en algunos casos también hay algún valor numismático involucrado en el precio de las monedas. Por ejemplo, las monedas de 25 centavos y de 10 centavos estadounidenses acuñadas antes de 1965 contienen un 90% de plata y suelen ser adquiridas por los inversores en monedas por su contenido metálico. Pedir una bolsa mixta de monedas de plata de desecho es una buena manera de completar las fechas que faltan en su colección y, al mismo tiempo, invertir en plata metálica.
Algunas monedas, como los dólares americanos de plata, se encuentran en algún lugar de la frontera entre las inversiones en lingotes y las inversiones numismáticas. Estas monedas son lo suficientemente comunes como para no tener un inmenso valor de coleccionista, pero al mismo tiempo, se venden a precios superiores a su valor en bruto en lingotes. Estas monedas no son necesariamente las mejores inversiones desde el punto de vista del crecimiento, pero mantienen su valor razonablemente bien. Dado que las monedas de esta categoría tienden a ser más antiguas, también son muy divertidas de coleccionar para los amantes del atractivo histórico de la numismática. Las monedas de oro anteriores a 1933 también entran en esta categoría, aunque su valor en lingotes es, por supuesto, mucho mayor que el de las monedas de plata.
Por último, hay muchas monedas que son predominantemente inversiones numismáticas. Aunque el valor del metal en lingotes sigue siendo un factor en el precio global de estas monedas, su escasez hace que su valor de coleccionista constituya la mayor parte de su coste final. Si desea invertir en monedas principalmente por su valor de coleccionista, es importante saber exactamente qué monedas tendrán más demanda entre los coleccionistas.
Típicamente, las fechas raras y las marcas de ceca son dos de los factores que más contribuyen al valor numismático de una moneda. Los errores de acuñación poco frecuentes también pueden aumentar el valor de una moneda. Si se invierte en monedas únicamente por su valor numismático, es importante comprar sólo monedas certificadas. Las monedas certificadas son aquellas que han sido inspeccionadas y clasificadas por una organización reconocida, y luego colocadas en un estuche protector.
Un último factor a tener en cuenta es que, en contra de la creencia popular, una moneda no tiene que costar necesariamente miles de dólares para ser una buena inversión por su valor numismático. Uno de los mejores ejemplos de una moneda asequible que se valora sobre todo como pieza de coleccionista es el níquel Jefferson de 1950-D. Considerada una pareja de fecha clave y marca de ceca, una moneda de níquel de 1950-D puede venderse por 70 dólares o más en grados no circulados. Aunque es extremadamente alta en comparación con sus valores faciales y de lingotes, el valor numismático asociado a esta moneda la hace razonable para los coleccionistas con un presupuesto.
Buscando gangas: La clave para invertir con éxito
Invertir en monedas es como cualquier otro tipo de inversión, ya que es importante reconocer los activos infravalorados. Si tiene un excelente conocimiento de los valores de las monedas, puede encontrar monedas que se venden en ventas de bienes, tiendas de antigüedades, ferias de intercambio y otros lugares con precios muy inferiores a sus valores reales.
De forma similar, aprender a interpretar con éxito los movimientos de los mercados de metales preciosos puede ayudarle a optimizar el momento de sus compras. Cuando los precios de la plata bajan, por ejemplo, puede ser un buen momento para añadir lingotes de plata a su cartera. Reconocer las ofertas, al igual que en las acciones, los bienes inmuebles o cualquier otra clase de activos de inversión, le ayudará a convertirse en un inversor más exitoso y rico en monedas de metales preciosos.
La importancia de mantener la diversión
Aunque las monedas pueden ser definitivamente inversiones rentables, es importante que su afición a coleccionar monedas siga siendo divertida. Si disfruta comprando monedas por su significado histórico o por su belleza, no tiene que dejar de hacerlo sólo porque las monedas que le gustan no sean necesariamente las mejores inversiones.
Sin embargo, al incorporar algunas buenas inversiones a su colección, puede ganar algo de dinero con su afición y explorar un lado completamente diferente del coleccionismo de monedas.