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Independientemente de que usted sea una madre primeriza o de que vaya a tener a su cuarto bebé, los días y las semanas inmediatamente posteriores al nacimiento de su bebé pueden ser tan agobiantes como alegres y emocionantes.

Muchas mujeres experimentan sentimientos de tristeza después del parto, que van de la breve tristeza posparto a una depresión más profunda y duradera conocida como depresión posparto.

La tristeza posparto y la depresión posparto son más frecuentes después del parto de lo que mucha gente cree. Es importante que las madres que acaban de dar a luz (y sus allegados) entiendan los síntomas de la depresión posparto y acudan a la familia, amigos y profesionales médicos para que las ayuden.

Con el apoyo y el tratamiento adecuados, las madres deprimidas pueden convertirse en unas madres felices y sanas.

¿Qué es la tristeza posparto?

La mayoría de las madres experimentan lo que se conoce como tristeza posparto, sentimientos de tristeza y de preocupación que se inician los primeros días después del parto. En la tristeza posparto, es posible que una mujer se sienta feliz en un momento y triste o superada por las circunstancias al minuto siguiente. Se puede sentir triste, irritable, desanimada, infeliz, cansada o malhumorada. La tristeza posparto suele durar solo unos pocos días, aunque puede durar hasta una semana o dos.

¿Por qué ocurre?

Se cree que estos cambios en el estado de ánimo son un efecto natural de los cambios hormonales que acompañan al embarazo y al parto. Las concentraciones de estrógeno y progesterona, que aumentaron durante el embarazo, bajan súbitamente después del parto, y esto puede afectar al estado de ánimo. Estas hormonas recuperan las concentraciones previas al embarazo al cabo de una semana aproximadamente. A medida que estas concentraciones se normalizan, la tristeza suele remitir sin tratamiento médico alguno.

¿Qué hacer?

Reposar, alimentarse bien y contar con el apoyo adecuado son importantes, ya que estar agotada, dormir poco o sentirse estresada pueden empeorar los sentimientos de tristeza.

Para afrontar la tristeza posparto, las madres que acaban de dar a luz deben tratar de aceptar la ayuda de sus allegados los primeros días y semanas después del parto. Deje que su familia y amigos la ayuden con los recados, la compra de alimentos, los quehaceres domésticos o el cuidado de los niños. Deje que alguien prepare la comida o atienda al bebé mientras usted se relaja con una ducha caliente, un baño relajante o toma una siesta.

Descanse al máximo y coma alimentos nutritivos. Hablar con personas cercanas o con otras madres que acaban de dar a luz puede ayudarle a sentirse apoyada y recordarle que no está sola. No reprima el llanto si tiene la necesidad de llorar un poco, pero trate de no obsesionarse con las ideas tristes. Deje que la tristeza posparto siga su curso y pase.

Cuándo llamar al médico

Si la tristeza posparto dura más de una o dos semanas, hable con su médico para saber si una depresión posparto podría ser la causa de su estado emocional.

¿Qué es una depresión posparto?

Para algunas mujeres, la tristeza y el agotamiento son más profundos y duran más que la tristeza posparto típica. Lo síntomas de la depresión posparto están desencadenados por el nacimiento del bebé.

La depresión posparto generalmente puede empezar poco antes de dar o luz o en cualquier momento hasta los 12 meses después del parto.

Una mujer con depresión posparto se puede sentir triste, desesperada, con ganas de llorar, ansiosa, muy desanimada, inquieta, inútil y/o sola. También puede:

  • tener problemas para concentrarse o para completar las tareas cotidianas
  • perder el apetito o dejar de interesarle la comida
  • sentir que no es una buena madre
  • perder el interés por su bebé o estar muy preocupada por la salud del pequeño
  • sentirse agobiada y superada por la situación y creer que no hay esperanza de que las cosas mejoren

Tener sentimientos y pensamientos como estos es doloroso para cualquier mujer, sobre todo en una época en que se supone que debería sentirse feliz. Muchas mujeres son reacias a explicárselo a otra persona cuando se sienten así. Pero la depresión posparto es una afección médica que requiere atención y tratamiento.

¿Por qué ocurre?

Al igual que la tristeza posparto, se cree que la depresión posparto está relacionada con los cambios hormonales que ocurren durante y después del parto. Estas fluctuaciones hormonales pueden conducir a la tristeza, la ansiedad y la depresión, que es más grave y dura más tiempo que la tristeza posparto.

La depresión posparto puede afectar a cualquier mujer, pero hay algunas que pueden tener un mayor riesgo a desarrollarla. Las mujeres con antecedentes de depresión (lo que también incluye la depresión posparto en embarazos previos) o con antecedentes familiares de depresión tienen más probabilidades de desarrollar una depresión posparto.

Otros factores que favorecen la depresión posparto son el estrés grave durante el embarazo, los problemas médicos durante el embrazo o después del parto y la falta de apoyo en casa.

Cuándo llamar al médico

Si los sentimientos de tristeza o depresión son fuertes, si permanecen la mayor parte del día durante varios días seguidos o si duran más de una semana o dos, hable con su médico. Una madre que acaba de dar a luz que se da por vencida, que cree que no vale la pena vivir o que tiene ideas de hacerse daño a sí misma o de lastimar a su bebé debe informar a su médico de inmediato.

La depresión posparto puede durar varios meses o incluso más si no se trata. Con el tratamiento adecuado, una mujer se puede recuperar y volver a encontrase bien. El tratamiento puede incluir psicoterapia, medicamentos o ambas cosas a la vez. Además, llevar una dieta saludable, hacer ejercicio, descansar lo suficiente y contar con apoyo social pueden ser de gran ayuda.

Las mujeres con depresión posparto pueden tardar varias semanas en empezar a encontrase mejor desde el punto de vista emocional después de iniciar el tratamiento, aunque hay algunas que se empiezan a encontrar mejor antes. Pregunte a su médico para cuándo puede esperar una mejoría y sobre formas de cuidar de sí misma mientras tanto.

¿Qué es una psicosis posparto?

Una afección más grave y muy poco frecuente es la psicosis posparto. Puede incluir alucinaciones, como escuchar voces o ver cosas que no existen, pensamientos paranoicos, insomnio grave y comportamientos extraños.

En la psicosis posparto, una mujer puede tener ideas irracionales sobre su bebé, como que el bebé está poseído o que se tiene que hacer daño a sí misma o lastimar a su hijo. Esta afección es sumamente grave, y las madres que acaban de dar a luz que experimenten estos síntomas necesitan atención médica de inmediato.

¿Por qué ocurre?

Las mujeres que tienen otras enfermedades psiquiátricas, como un trastorno bipolar o una esquizofrenia, tienen un riesgo más alto de desarrollar una psicosis posparto.

Cuándo llamar al médico

La psicosis posparto requiere atención médica inmediata y, a menudo, internamiento hospitalario. Si usted o alguien que conoce está experimentando síntomas de esta afección, pida atención médica inmediata.

¿Cómo puedo obtener ayuda?

Si está teniendo problemas en el estado de ánimo, la ideas y los sentimientos después del parto, explíqueselo a su médico. Cuénteselo también a alguien que sea de su confianza, como su pareja, un amigo o un familiar. Este es un buen momento para acudir a alguien y aceptar la ayuda y el apoyo de sus allegados.

Aparte de recibir tratamiento para la depresión posparto, hay pequeñas cosas que pueden hacer más llevaderos los momentos difíciles. Tal vez le ayude:

  • Dedicarse tiempo a sí misma. Contrate a un cuidador en un horario regular. Así, tendrá la seguridad de tener tiempo para sí misma y sabrá cuándo.
  • Centrarse en programar pequeñas cosas para el final del día. Se podría tratar de una ducha caliente, un baño relajante, un paseo por su barrio o visitar a una amiga.
  • Leer algo que levante el ánimo. Debido a que la depresión puede dificultar la concentración, elija algo ligero y positivo y que se pueda leer a ratos cortos.
  • Permitirse pequeños placeres sencillos. Hojear una revista, escuchar música que le guste, tomarse una taza de té.
  • Estar con otras personas. Busque oportunidades para pasar tiempo con otros adultos, como la familia y los amigos, quienes le pueden brindar apoyo y buena compañía.
  • Pedir ayuda. No se avergüence por tener que pedir apoyo emocional o ayuda para cuidar del bebé o hacer las tareas domésticas.
  • Aceptar la ayuda. Aceptar la ayuda no la convierte en una inútil; si acude a alguien, se estará ayudando a sí misma y a su bebé.
  • Descansar. Ofrezca a su hijo un lugar silencioso para dormir, e intente descansar cuando lo haga él.
  • Moverse. Una caminata diaria puede ayudarle a levantar el ánimo. (Consulte a su médico antes de iniciar cualquier nuevo programa de ejercicio físico).
  • Tener paciencia. Debe saber que puede costarle un tiempo encontrarse mejor; vaya paso a paso.
  • Ser optimista. Trate de pensar en todas las pequeñas cosas por las que se siente agradecida.
  • Unirse a grupos de apoyo. Pregúntele a su médico o al centro de mujeres de su localidad sobre los recursos disponibles.

Cómo ayudar a alguien con una depresión posparto

Si le preocupa que su pareja o alguien que conoce tenga una depresión posparto, es importante animarla a hablar con su médico y con un profesional de salud mental. Una mujer puede ser reacia a pedir ayuda o es posible que no reconozca sus propios síntomas.

Considere la posibilidad de ofrecerle información sobre la depresión posparto y ofrézcase a leerla los dos juntos. Puede ofrecerse también a concertarle una visita con el profesional de la salud y a acompañarla si ella lo desea.

Cuando ya esté recibiendo los cuidados que necesita, el apoyo, el amor, y la amistad también son una buena medicina. He aquí lo que puede seguir haciendo por ella:

  • Preguntarle con regularidad cómo se encuentra y cómo se siente.
  • Escucharla cuando quiera hablar.
  • Dar un paseo con ella.
  • Prepararle una comida nutritiva.
  • Darle un respiro en las tareas domésticas y en cuidar de los niños.
  • Animarla a echarse una siesta o a darse un baño relajante mientras usted cuida del bebé.
  • Ser paciente y amable.
  • Creer en ella, y recordarle sus verdaderas cualidades y sus puntos fuertes.

De cara al futuro

Como todos los tipos de depresión, la depresión posparto crea en la mujer que la padece un nubarrón de sentimientos y pensamientos negativos sobre sí misma, las personas que la rodean, su situación y su futuro.

Con el tratamiento y el apoyo adecuados, esa forma de ver la vida se disipa y se supera. Esto puede liberar a la mujer para que vuelva a ser ella misma otra vez, y pueda recuperar su perspectiva y el sentido de su propia fuerza, energía, alegría y esperanza. Aplicando estos consejos, resulta más fácil afrontar los cambios, ver soluciones a los desafíos que nos plantea la vida y volver a disfrutar de los placeres de estar vivo.

Revisado por: Mary L. Gavin, MD
Fecha de revisión: enero de 2018

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