Las personas a las que se les ha diagnosticado presión arterial alta (hipertensión) suelen recibir una medicación recetada para bajar la presión y evitar daños en las arterias. Pero, en ocasiones, la medicación para la presión arterial alta produce efectos secundarios que podrían indicar la necesidad de reducir la dosis o cambiar la medicación por otra.
Sin embargo, experimentar efectos secundarios de la medicación para la presión arterial alta no suele ser motivo para dejar de tomar las pastillas. Las complicaciones potenciales de la hipertensión no controlada incluyen los accidentes cerebrovasculares y los ataques cardíacos, por lo que debe seguir tomando la medicación hasta que su médico le diga lo contrario. Manténgase alerta ante estos posibles efectos secundarios de la medicación para la hipertensión y notifique a su médico si los experimenta.
Cuándo llamar al 911 por efectos secundarios de la medicación para la hipertensión
En raras ocasiones, la medicación para la hipertensión puede provocar una caída extrema de la presión arterial que requiera tratamiento médico de urgencia. Llame al 911 si alguien que conoce toma medicamentos para la presión arterial y experimenta:
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Una serie de lecturas de la presión arterial por debajo de 90/60 mm Hg acompañadas de otros síntomas
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Estado mental alterado, incluyendo confusión extrema o pérdida de conciencia
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Incapacidad para despertar a la persona
Afortunadamente, estos síntomas son muy raros. La mayoría de las personas toman medicamentos para la hipertensión sin experimentar nunca ni siquiera un efecto secundario menor.
Efectos secundarios de los medicamentos para la hipertensión a los que hay que prestar atención
Los médicos pueden elegir entre una amplia gama de medicamentos para la hipertensión. Estos medicamentos se dividen en más de 10 clases diferentes, con múltiples opciones de medicamentos dentro de cada categoría. Pero independientemente de la clase, todos los medicamentos de este tipo pueden producir efectos secundarios. Debe comentar con su médico los posibles efectos secundarios del fármaco específico que le está recetando, incluidos los síntomas que requieren una rápida intervención médica.
En general, tanto si está tomando un medicamento diurético para la hipertensión, un inhibidor de la ECA, un betabloqueante o algún otro tipo de fármaco, esté atento a estos síntomas que podrían indicar que es necesario ajustar su dosis:
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Síntomas de asma o tos seca
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Diarrea, ardor de estómago grave o náuseas persistentes
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Disfunción eréctil (impotencia)
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Extrema somnolencia persistente, debilidad o desmayo
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Caída por mareo al ponerse de pie
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Dolores de cabeza frecuentes
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Palpitaciones del corazón
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Insomnio persistente o pesadillas
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Persistente, latidos del corazón lentos (por debajo de 60 latidos por minuto), especialmente si van acompañados de otros síntomas
Manejo de los efectos secundarios con cambios en el estilo de vida
A menudo, su médico le recomendará que haga cambios en su estilo de vida para hacer frente a los efectos secundarios de los medicamentos para la hipertensión en lugar de cambiar la dosis. Antes de realizar estos cambios por su cuenta, consulte siempre a su médico. Si te da el visto bueno, puedes probar:
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Comer alimentos ricos en potasio para hacer frente a síntomas como la fatiga y la debilidad cuando se toma un fármaco diurético
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Levantarse lentamente para evitar la sensación de mareo o caída por la bajada de tensión que puede producirse al levantarse
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Tener precaución con los descongestionantes de venta libre, analgésicos, suplementos y remedios naturistas, para evitar la creación de efectos secundarios adicionales
Muchas veces, los efectos secundarios de los medicamentos para la presión arterial alta siguen siendo leves y manejables sin requerir un ajuste de la dosis. Sin embargo, algunas personas necesitan probar varios tipos diferentes de medicamentos para la presión arterial antes de que usted y su médico encuentren el que le funcione sin producir efectos secundarios.
Nunca deje de tomar su medicación para la hipertensión debido a los efectos secundarios, ya que la interrupción brusca de estos medicamentos puede hacer que su presión se dispare y potencialmente inducir un accidente cerebrovascular o un ataque al corazón. Si los efectos secundarios de la medicación son intolerables para usted, llame a su médico para saber qué hacer.