La cirugía de la gastrectomía en manga laparoscópica se realiza en un hospital bajo anestesia general. Su cirujano realizará unos cinco pequeños cortes en su vientre. El cirujano realizará la operación con un telescopio delgado y largo con una cámara diminuta en el extremo. A través de las incisiones se utilizarán instrumentos para extirpar aproximadamente el 80% de su estómago. El cirujano llevará a cabo la intervención utilizando imágenes en una pantalla de televisión en el quirófano.
Esta intervención extrae la parte del estómago que se curva hacia fuera, denominada fondo de saco. Una vez extraído el fondo, el cirujano cerrará el resto del estómago en forma de tubo que parece un plátano o la manga de la camisa, de ahí el nombre de «gastrectomía en manga». Como tendrá un estómago mucho más pequeño, se llenará rápidamente en las comidas y comerá menos.
El fondo del estómago contiene la mayor parte de la zona que segrega una hormona llamada grelina. Dado que la grelina puede ser en parte responsable de la sensación de hambre, la extirpación de esta parte del estómago también puede ayudarle a perder peso después al disminuir su hambre.
La cirugía de LSG dura unas 2 horas. La mayoría de las personas permanecen en el hospital durante unos 2 días después de la cirugía.
Razones para considerar la cirugía de LSG
A continuación se exponen algunas razones por las que la LSG puede ser adecuada para usted:
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Si tiene un IMC superior a 60, la LSG puede utilizarse como primera cirugía para ayudarle a perder el peso suficiente para que luego pueda someterse con seguridad a un tipo de cirugía de pérdida de peso más extenso, como un bypass gástrico o un cruce duodenal con derivación biliopancreática. Los riesgos de algunas formas de cirugía bariátrica son mucho mayores para las personas con un IMC superior a 60.
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Si es usted mayor o tiene otros factores de riesgo para la cirugía, como problemas cardíacos, pulmonares o hepáticos, la LSG puede ser una opción más segura para usted que otras cirugías de pérdida de peso más largas y complicadas.
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Si tiene un IMC de entre 40 y 50, es posible que su médico le recomiende la LSG como cirugía principal para perder peso. Esto se debe a que es menos probable que cause efectos secundarios. Estos incluyen úlceras estomacales o mala absorción de los alimentos que otras formas de cirugía de pérdida de peso.
Beneficios de la LSG para la pérdida de peso
En los primeros 2 años después de la LSG, la mayoría de las personas perderán entre el 40% y el 50% de su peso corporal. Si su IMC antes de la intervención es de 60 o más, puede perder unas 125 libras.
Los estudios también demuestran que si tiene problemas relacionados con la obesidad como la diabetes, la hipertensión, la apnea del sueño o el colesterol alto, tiene aproximadamente un 75% de probabilidades de que estas afecciones también mejoren.
Riesgos de la cirugía de LSG
Cualquier intervención quirúrgica realizada con anestesia general conlleva cierto riesgo de daño cardíaco y cerebral, pero estos riesgos son bajos. La LSG es un procedimiento más corto que otros tipos de cirugía de bypass gástrico. Con la cirugía LSG tiene un riesgo del 5% al 10% de sufrir una complicación como:
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Fuga de jugos gástricos de donde se ha extirpado el estómago
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Sangrado
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Coágulo de sangre que se forma en su pierna y viaja a sus pulmones y corazón
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Estrechamiento del diámetro interior del nuevo estómago
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Infección
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Nutrientes mal absorbidos
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Para ayudar a proteger contra los problemas gastrointestinales y la recuperación de peso, debe continuar con un seguimiento cuidadoso más allá del tercer año después de la cirugía.
La pérdida de peso después de la LSG se ralentiza después de unos años, y su estómago puede estirarse y crecer. Para que cualquier cirugía bariátrica tenga éxito, debe realizar importantes cambios en su estilo de vida que incluyan tanto una mejor nutrición como ejercicio regular.
Asegúrese de discutir cuidadosamente cualquier tipo de cirugía de pérdida de peso con su proveedor de atención médica. Antes de la cirugía, deberá someterse a un examen físico completo para asegurarse de que está lo suficientemente sano para someterse al procedimiento. También debe recibir asesoramiento nutricional y de salud mental para asegurarse de que está preparado para lo que puede esperar después de la cirugía.