Publicado originalmente en Health Science.
En el mundo de nuestros antiguos ancestros, el ayuno se producía principalmente por fuerza, no por elección. Los humanos ayunaban cuando los recursos escaseaban, como cuando la primavera se retrasaba. La capacidad de los humanos para ayunar era una necesidad biológica nacida del uso desproporcionado de la glucosa por parte del cerebro. Si no fuera por la adaptación biológica que llamamos ayuno, nuestra especie nunca habría sobrevivido. Durante el ayuno, el cuerpo utiliza preferentemente la grasa para obtener energía y descompone otros tejidos en orden inverso a su importancia para el organismo.
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Hoy en día, el entorno de escasez ha sido eliminado en gran medida en los países industrializados y ha sido sustituido por un entorno de exceso. Sorprendentemente, el proceso fisiológico del ayuno, que una vez nos impidió morir de hambre, ahora puede ayudarnos a superar los efectos del exceso dietético del consumo de productos químicos «trampa del placer», incluyendo el aceite, el azúcar y la sal, así como los productos de harina altamente procesados y los alimentos de animales de granja que han dado lugar a una epidemia de obesidad, enfermedades cardiovasculares, diabetes, trastornos autoinmunes y cáncer. Podemos utilizar el proceso natural del ayuno para contrarrestar los efectos de las malas elecciones dietéticas y para ayudar a realizar la transición a una dieta que promueva la salud.
¿Podría ayudar el ayuno? En los últimos 30 años, he sido testigo del efecto del ayuno con agua bajo supervisión médica en más de 8.000 pacientes. No hay nada que sea más eficaz que el ayuno cuando se trata de tratar las consecuencias de los excesos alimentarios. No todas las enfermedades responden al ayuno. Los trastornos genéticos y ciertos tipos de enfermedades renales, por ejemplo, pueden no responder. Pero muchas de las causas más comunes de muerte prematura y discapacidad responden, y a menudo de forma espectacular.
¿Quién se beneficia del ayuno?
Las siguientes son seis de las condiciones más comunes que responden bien.
1. La obesidad. La obesidad es principalmente el resultado de la adicción a la estimulación artificial de la dopamina en el cerebro por el consumo de productos químicos añadidos a nuestros alimentos, incluyendo aceite, azúcar, sal y productos lácteos. La respuesta a la obesidad es adoptar una dieta saludable derivada exclusivamente de alimentos naturales enteros, incluyendo frutas y verduras, frutos secos y semillas crudas y la adición variable de granos y frijoles mínimamente procesados y no glutinosos. Cuando se aplica en su totalidad, junto con el sueño y la actividad adecuados, se producirá una pérdida de peso predecible y constante, con un promedio de 1,5 a 2 libras por semana para las mujeres y de 2 a 3 libras por semana para los hombres. Si su objetivo es perder el exceso de grasa y tiene problemas para adoptar un programa que promueva la salud, un período de ayuno puede ser beneficioso. El entorno protegido de un centro de ayuno ofrece una oportunidad de educación intensa y el apoyo social necesario para escapar de las fuerzas adictivas de la trampa del placer dietético. La experiencia del ayuno funciona como el reinicio de un disco duro dañado en un ordenador. Después del ayuno, los alimentos naturales enteros vuelven a ser atractivos, lo que hace más factible la adopción de una dieta que promueva la salud. Si su objetivo es perder peso y escapar de la trampa del placer de los alimentos procesados, un período de ayuno de unos días a unas semanas puede ser beneficioso.
2. La trampa del placer dietético es insidiosa, y las consecuencias de las malas elecciones dietéticas van más allá de la obesidad. La sobreestimulación mediante calorías concentradas artificialmente puede confundir las señales normales de saciedad, lo que da lugar a una sobrealimentación persistente. Con el tiempo, esto da lugar a las enfermedades degenerativas de los excesos alimentarios, como la hipertensión arterial y las consiguientes enfermedades cardiovasculares. En el caso de las personas que han caído en la trampa del placer dietético y han desarrollado una presión arterial alta, el ayuno sólo con agua bajo supervisión médica ha demostrado ser un medio seguro y eficaz para normalizar la presión arterial y revertir las enfermedades cardiovasculares. En un estudio realizado en el Centro de Salud TrueNorth junto con el profesor T. Colin Campbell de la Universidad de Cornell, el uso del ayuno durante 2-4 semanas en pacientes con hipertensión en fase 3 dio lugar a reducciones de la presión arterial sistólica de más de 60 mm/Hg. Este es el mayor tamaño del efecto de cualquier estudio publicado hasta la fecha. En el Centro de Salud TrueNorth vemos rutinariamente a los pacientes normalizar su presión arterial y eliminar la necesidad de medicamentos. Si su objetivo es normalizar la presión arterial elevada y revertir las enfermedades cardiovasculares, un período de ayuno supervisado médicamente puede ser beneficioso.
3. La diabetes tipo 2 es una condición que está aumentando en proporciones epidémicas. Consecuencia en gran medida de los excesos alimentarios, la alteración resultante de las funciones fisiológicas, como los niveles elevados de azúcar en sangre y la resistencia a la insulina, da lugar a una cascada de consecuencias que incluyen la ceguera por daños en la retina, los infartos de miocardio y los derrames cerebrales, la reducción de la capacidad de cicatrización, los daños nerviosos, la impotencia, la gangrena, etc. El ayuno, junto con una dieta saludable y un programa de ejercicio, puede aumentar drásticamente la sensibilidad a la insulina y poner los niveles de azúcar en sangre bajo control. Si su objetivo es normalizar los niveles de azúcar en sangre y evitar o eliminar la necesidad de medicamentos y sus consecuencias, un periodo de ayuno puede resultar beneficioso. La mayoría de los pacientes con diabetes de tipo 2 son capaces de alcanzar niveles normales de azúcar en sangre sin necesidad de medicamentos.
4. La adicción a las drogas se ha convertido en la norma. La nicotina, el alcohol, la cafeína y una plétora de medicamentos recetados y recreativos dominan la vida de la mayoría de las personas que viven en la sociedad industrializada. El entorno de apoyo de un centro de ayuno puede ser útil para superar con seguridad los síntomas de abstinencia y establecer con mayor eficacia hábitos saludables, al tiempo que se elimina la necesidad percibida de sustancias adictivas. Si su objetivo es escapar de la adicción y vivir una vida libre de la dependencia de sustancias químicas que comprometen la salud, un período de ayuno puede resultar beneficioso.
5. Los trastornos autoinmunes, como la artritis, el lupus, la colitis, la enfermedad de Crohn, el asma, el eczema, la psoriasis y las alergias ambientales, son cada vez más comunes y más debilitantes. Un posible factor que contribuye al agravamiento de las enfermedades autoinmunes es la filtración intestinal. La absorción de sustancias antigénicas en el torrente sanguíneo como resultado de una mayor permeabilidad intestinal parece ser un factor de agravamiento de estas enfermedades. El ayuno puede ayudar a normalizar la permeabilidad intestinal y facilitar la transición a una dieta saludable y poco inflamatoria. Muchos de nuestros pacientes son capaces de controlar eficazmente los síntomas de los trastornos autoinmunes, eliminando así la necesidad de medicación. Si su objetivo es eliminar los problemas asociados a los trastornos autoinmunes, un período de ayuno bajo supervisión médica puede ser un componente importante de un programa integral diseñado para salvar la calidad y la cantidad de su vida.
6. El agotamiento, tanto físico como emocional, se ha vuelto cada vez más común en nuestras vidas aceleradas. Los sentimientos de fatiga y depresión pueden comprometer la calidad de su vida. La dependencia de los estimulantes artificiales agrava el problema. La falta de sueño y ejercicio adecuados, así como las malas elecciones dietéticas y de estilo de vida, interfieren en la capacidad de muchas personas para disfrutar de su vida o desarrollar su potencial. El ayuno puede dar a su cuerpo y a su mente un descanso completo. Si su objetivo es «recargar» su sistema, el ayuno puede ayudarle a lograr sus objetivos. Cuando se utiliza correctamente, el ayuno puede ser una herramienta poderosa para ayudar a su cuerpo a hacer lo que mejor sabe hacer… curarse a sí mismo. Es la respuesta a un sorprendente número de preguntas.
Abajo: True North Health Center
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