El Decán produjo algunas de las dinastías más significativas de la Historia de la India como el Imperio Vijayanagara, la dinastía Rashtrakuta, la dinastía Chola, la dinastía Thagadur, los Adhiyamans Pallavas, los Tondaiman, la dinastía Satavahana, la dinastía Vakataka, la dinastía Kadamba, la dinastía Chalukya, la dinastía Kakatiya, el Imperio Chalukya Occidental y el Imperio Maratha. De la historia temprana, los principales hechos constatados son el crecimiento del imperio Mauryan (300 a.C.) y después el Decán fue gobernado por la dinastía Satavahana que protegió el Decán contra los invasores escitas, los sátrapas occidentales. Entre las dinastías más destacadas de esta época están las Cholas (siglo III a.C. a siglo XII d.C.), las Chalukyas (siglos VI a XII), las Rashtrakutas (753-982), las Hoysalas (siglos X a XIV), las Kakatiya (1083 a 1323 d.C.) y el Imperio Vijayanagara (1336-1646). Los reyes Ahir gobernaron en el Decán. Una inscripción rupestre en Nasik hace referencia al reinado de un príncipe abhira llamado Ishwarsena, hijo de Shivadatta. Tras el colapso de la dinastía Satavahana, el Decán fue gobernado por la dinastía Vakataka desde el siglo III hasta el siglo V.
Del siglo VI al VIII el Decán fue gobernado por la dinastía Chalukya, que produjo grandes gobernantes como Pulakesi II, que derrotó al emperador del norte de la India Harsha, o Vikramaditya II, cuyo general derrotó a los invasores árabes en el siglo VIII. Del siglo VIII al X, la dinastía Rashtrakuta gobernó esta región. En el siglo X se estableció el Imperio Chalukya Occidental, que produjo eruditos como el reformador social Basavanna, Vijñāneśvara, el matemático Bhāskara II y Someshwara III, que escribió el texto Manasollasa. Desde principios del siglo XI hasta el siglo XII, la meseta del Decán estuvo dominada por el Imperio Chalukya Occidental y la dinastía Chola. Se libraron varias batallas entre el Imperio Chalukya Occidental y la dinastía Chola en la Meseta del Decán durante los reinados de Raja Chola I, Rajendra Chola I, Jayasimha II, Someshvara I y Vikramaditya VI y Kulottunga I.
En 1294, Alauddin Khalji, emperador de Delhi, invadió el Decán, asaltó Devagiri, y redujo a los rajas Yadava de Maharashtra a la posición de príncipes tributarios (ver Daulatabad), procediendo luego hacia el sur para conquistar el Orugallu, Carnatic. En 1307 se inició una nueva serie de incursiones dirigidas por Malik Kafur en respuesta a los tributos impagados, lo que supuso la ruina definitiva del clan Yadava; y en 1338 el sultán Muhammad bin Tughluq completó la conquista del Decán. La hegemonía imperial fue breve, ya que pronto los reinos anteriores volvieron a sus antiguos amos. Estas deserciones de los estados fueron seguidas pronto por una revuelta general de los gobernadores extranjeros, lo que dio lugar al establecimiento en 1347 de la dinastía independiente Bahmani. El poder del sultanato de Delhi se evaporó al sur del río Narmada. El sur del Decán quedó bajo el dominio del famoso Imperio Vijayanagara, que alcanzó su apogeo durante el reinado del emperador Krishnadevaraya.
En las luchas de poder que siguieron, el reino hindú de Karnataka cayó poco a poco en manos de la dinastía Bahamani, que avanzó su frontera hasta Golkonda en 1373, hasta Warangal en 1421, y hasta la Bahía de Bengala en 1472. Krishnadevaraya, del Imperio Vijayanagara, derrotó al último remanente de poder del sultanato Bahmani, tras lo cual éste se derrumbó. Cuando el imperio bahmaní se disolvió en 1518, sus dominios se repartieron en los cinco estados musulmanes de Golkonda, Bijapur, Ahmednagar, Bidar y Berar, dando lugar a los sultanatos del Decán. Al sur de éstos, aún sobrevivía el estado hindú de Carnatic o Vijayanagar; pero éste también fue derrotado, en la batalla de Talikota (1565), por una liga de las potencias musulmanas. Berar ya había sido anexionada por Ahmednagar en 1572, y Bidar fue absorbida por Bijapur en 1619. El interés mogol por el Decán también aumentó en esta época. Incorporada parcialmente al Imperio en 1598, Ahmadnagar fue anexionada por completo en 1636; Bijapur en 1686, y Golkonda en 1687.
En 1645, Shivaji sentó las bases del Imperio Maratha. Los marathas, bajo el mando de Shivaji, desafiaron directamente al sultanato de Bijapur y, en última instancia, al poderoso imperio mogol. Una vez que el sultanato de Bijapur dejó de ser una amenaza para el imperio maratha, los marathas se volvieron mucho más agresivos y empezaron a asaltar con frecuencia el territorio mogol. Sin embargo, estas incursiones enfurecieron al emperador mogol Aurangzeb y en 1680 trasladó su capital de Delhi a Aurangabad, en el Decán, para conquistar los territorios maratha. Tras la muerte de Shivaji, su hijo Sambhaji defendió el imperio maratha del ataque mogol, pero fue capturado por los mogoles y ejecutado. En 1698 cayó el último bastión maratha en Jinji y los mogoles pasaron a controlar todos los territorios maratha.
En 1707, el emperador Aurangzeb murió de enfermedad a la edad de 89 años y esto permitió a los marathas readquirir los territorios perdidos y establecer su autoridad en gran parte del Maharashtra moderno. Tras la muerte de Chhatrapati Shahu, los Peshwas se convirtieron en los líderes de facto del Imperio desde 1749 hasta 1761, mientras que los sucesores de Shivaji continuaron como gobernantes nominales desde su base en Satara. Los marathas mantuvieron a raya a los británicos durante el siglo XVIII. En 1760, con la derrota del Nizam en el Decán, el poder maratha había alcanzado su cenit. Sin embargo, las disensiones entre los Peshwa y sus sardars (comandantes del ejército) supusieron una caída gradual del imperio que condujo a su eventual anexión por parte de la Compañía Británica de las Indias Orientales en 1818, tras las tres guerras anglo-marathas.
Unos años más tarde, el virrey de Aurangzeb en Ahmednagar, Nizam-ul-Mulk, estableció la sede de un gobierno independiente en Hyderabad en 1724. Mysore fue gobernada por Hyder Ali. Durante las contiendas por el poder que se produjeron desde mediados del siglo XVIII entre las potencias de la meseta, los franceses y los británicos tomaron bandos opuestos. Tras un breve período de triunfo, los intereses de Francia decayeron y los británicos establecieron un nuevo imperio en la India. Mysore fue una de sus primeras conquistas en el Decán. Tanjore y el Carnatic fueron pronto anexionados a sus dominios, seguidos por los territorios de los Peshwa en 1818.
En la India británica, la meseta estaba dividida en gran parte entre las presidencias de Bombay y Madrás. Los dos estados nativos más grandes en esa época eran Hyderabad y Mysore; entonces existían muchos estados más pequeños, como Kolhapur y Sawantwari.
Después de la independencia en 1947, casi todos los estados nativos fueron incorporados a la República de la India. El ejército indio ocupó Hyderabad en la Operación Polo en 1948 cuando se negó a incorporarse. En 1956, la Ley de Reorganización de los Estados reorganizó los estados según criterios lingüísticos, dando lugar a los estados que se encuentran actualmente en la meseta.