Usamos nuestras manos todos los días, por lo que las palmas con sudor pueden causar inconvenientes en diferentes circunstancias, desde estrechar la mano a alguien hasta tocar o coger objetos.
Por qué sudan mucho las manos
En general, nos sudan las manos en situaciones de estrés, miedo o excitación. Esto sucede porque las glándulas sudoríparas ecrinas tienen un grado de mayor concentración en nuestras manos, frente y pies. Están conectadas a nuestro sistema nervioso simpático, que se hace notar cuando estamos estresados o nerviosos.
Algunas personas que tienen hiperhidrosis, o sudoración excesiva, se dan cuenta de que solamente sufren de transpiración abundante en las manos. Esta enfermedad se denomina «hiperhidrosis palmar». Puede estar presente en el nacimiento, pero, en la mayoría de los casos, comienza a ocurrir durante la adolescencia. En algunos casos, la hiperhidrosis desaparece, y, en otros, dura toda la vida.
Cómo combatir el sudor de las manos
Aquí te damos algunos consejos para que sepas cómo controlar el sudor en las manos:
- Lávate las manos regularmente. A menos que estén sucias, con agua es suficiente, ya que el uso constante del jabón puede causar sequedad en la piel.
- Lleva siempre pañuelos de papel desechables para secarte las manos durante el día.
- Los geles hidroalcohólicos van a ayudarte a limpiar tus manos y secarlas cuando no tengas un baño o un lavamanos cerca.
- El talco (en polvo) es ideal si quieres saber cómo combatir el sudor en las manos: ayuda a absorber la transpiración y le da a tus manos más precisión para tomar objetos.
- A menos que haga frío, trata de no utilizar guantes, ya que hacen que la transpiración no se evapore y se note más.
- Debido a que el estrés es un factor muy importante en los problemas relacionados con las manos sudorosas, puede que te interese revisar otros tratamientos relacionados con él.
Las personas que sufren de transpiración abundante en las manos deben saber que existen tratamientos de diversos tipos para aprender cómo controlar el sudor en las manos. Consulta con tu médico para analizar todas las opciones que están a tu alcance.