La densidad de una alfombra es uno de los muchos factores que determinan su calidad y rendimiento general. A pesar de un error común, la densidad de la alfombra y el peso de la cara de la alfombra no son términos intercambiables que significan lo mismo, aunque el peso de la cara es un factor utilizado para calcular la densidad. El peso facial y la densidad son dos componentes totalmente diferentes cuando se trata de evaluar la calidad de una alfombra.
- El peso facial de la alfombra se refiere al peso de la fibra que se encuentra en 1 yarda cuadrada de alfombra. El estándar se mide en onzas.
- La densidad de la alfombra se refiere a lo juntas que están las fibras en el soporte de la alfombra.
Cómo calcular la densidad de la alfombra
La densidad de la alfombra se calcula con la siguiente fórmula:
- El peso de la cara de la alfombra multiplicado por 36
- dividido por la altura del pelo de la alfombra
- es igual a la densidad, medida en onzas por yarda cúbica
La altura del pelo es la longitud de las fibras de la alfombra desde sus puntas extremas hasta el punto en que llegan al soporte de la alfombra. En la fórmula anterior, la altura del pelo debe representarse como una fracción de pulgada, reflejada en formato decimal. Por ejemplo, una altura de pelo de 1/2 pulgada se representaría como 0,5, mientras que una altura de pelo de 1/4 de pulgada sería 0,25, y así sucesivamente.
El número que resulte del cálculo de densidad anterior será un número de cuatro dígitos. Por ejemplo, una alfombra con un peso frontal de 50 onzas y una altura de pelo de 1/2 pulgada tendría una densidad de 3.600 onzas por yarda cúbica (50 x 36 / 0,5 = 3.600).
Cómo juzgar la calidad de una alfombra
No utilice un solo factor como indicador de la calidad general de una alfombra. Todos los factores (densidad, peso de la cara, torsión, tipo de fibra, etc.) trabajan juntos para determinar el aspecto y el rendimiento general de la alfombra. Cada uno de estos factores debe tenerse en cuenta a la hora de tomar una decisión sobre la alfombra adecuada para su hogar.
Sin embargo, en igualdad de condiciones, cuanto mayor sea la densidad de la alfombra, más duradera será ésta y más agradable será bajo sus pies. Al igual que un césped es más exuberante si las hierbas son gruesas bajo los pies, una alfombra con mayor densidad de pelo se sentirá mejor y aguantará mejor el desgaste.
Valores mínimos de densidad
Para un rendimiento óptimo en condiciones domésticas normales, lo ideal es un valor de densidad de 3.000 o superior. Según The Carpet and Rug Institute, Inc., las condiciones de tráfico muy intenso (como las que se dan en el uso comercial intenso) requieren una densidad mínima de 5.000.