La noche antes de un gran examen puede ser estresante para los estudiantes. Muchos estudiantes se preguntan cómo deberían prepararse para el examen de mañana.
Lo primero es lo primero: prepararse para un examen la noche anterior no significa esperar hasta entonces para empezar a estudiar. Es importante asegurarse de que empiezas a estudiar pronto. Estudiar la noche anterior sólo te dejará estresado y frustrado.
Saber cómo prepararse adecuadamente para el examen puede reducir la ansiedad ante el mismo y ayudarte a obtener una mejor calificación. Sigue leyendo para saber qué hacer la noche antes de una prueba o examen (y qué errores evitar) para que puedas dar lo mejor de ti.
9 Cosas que hacer la noche antes de un examen
- Revisa tus apuntes de estudio
- Revisa los temas uno a uno
- No estudies hasta muy tarde
- Come bien
- Prepárate para la mañana
- Da un respiro a tu cerebro
- Haz algo de ejercicio
- Pon tu alarma
- Duerme bien
Aprovecha la noche antes del examen para hacer un simple repaso. No deberías abordar nada nuevo la noche antes de tu examen. En su lugar, revisa las notas de estudio que has creado durante tus sesiones de estudio de los últimos días.
Trabaja tus notas de estudio, cubriendo los temas uno a uno. Una vez que hayas revisado un tema, tómate un minuto para asegurarte de que recuerdas y entiendes el material. Si la respuesta es negativa, vuelve a repasar las áreas que necesitan un repaso adicional.
Las sesiones nocturnas de repaso no son una forma muy efectiva de estudiar. Puede parecer que estás aprovechando tu tiempo al máximo estudiando hasta el último minuto, pero al no darle a tu cerebro la oportunidad de descansar te será más difícil recordar la información que estudiaste.
Dar a tu mente la energía cerebral que necesita es importante si quieres hacer un buen examen. Eso significa comer bien la noche anterior mientras haces el repaso final de la materia. Tómate un tiempo para sentarte a cenar en familia mientras te tomas un descanso del estudio para recargar tu cerebro.
Reúne todo el material que necesitarás para tu examen del día siguiente. Asegúrate de tener bolígrafos, lápices, gomas de borrar y cualquier herramienta que necesites (como una regla o una calculadora). Guarda todo en tu mochila la noche anterior para evitar las búsquedas de última hora y el pánico a la mañana siguiente.
Tómate un tiempo antes de acostarte para guardar tus apuntes de estudio y relajarte. Lee un libro, escribe en un diario o habla con tu familia. Esto te ayudará a relajarte antes de acostarte, lo que facilitará que duermas bien para que tu cerebro pueda procesar la información que has pasado la noche repasando.
Después de pasar tiempo repasando para tu examen, haz algo de ejercicio saliendo a dar un pequeño paseo. Hacer un poco de ejercicio te ayudará a reducir cualquier estrés que sientas y a recargar tu cerebro.
Pon tu alarma para no quedarte dormido la mañana de tu examen. Date un tiempo extra por la mañana para tomar un buen desayuno y prepararte para el día sin sentirte apurado.
Una de las cosas más importantes la noche antes de un examen es dormir bien para que tu cerebro pueda recordar lo que has estudiado. Asegúrate de irte a la cama a una hora determinada para poder despertarte el día del examen sintiéndote renovado y bien descansado.
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