Actualizado el 28/03/19
La poda es esencial para mejorar la calidad y el rendimiento de tus plantas de cannabis. Es una práctica íntima entre el jardinero y la planta y te permite observar de cerca tus plantas y comprobar su estado de salud.
Puede parecer extraño cortar intencionadamente partes de tu planta, pero estas partes no producirán cogollos de calidad porque no recibirán una cantidad adecuada de luz: quedarán a la sombra de los cogollos y el follaje que crecen por encima.
Cortar las ramas permitirá a la planta redirigir su energía y recursos a los cogollos de calidad que recibirán mucha luz. También conviene podar las hojas amarillas o muertas de la planta, ya que no tienen ninguna utilidad y sólo desperdiciarán los recursos de la planta.
La poda también crea un espacio abierto en el centro de la planta, lo que permite que el aire fluya más libremente y que la luz penetre más profundamente, manteniendo la planta vibrante y saludable.
Qué hay que tener en cuenta al podar
Los cogollos de calidad crecen donde la planta recibe mucha luz solar y flujo de aire, especialmente en la parte superior de la planta. Querrás eliminar:
- Las ramas bajas que reciben poca luz solar
- Las hojas que se están muriendo por falta de luz
- Los sitios de los cogollos que están bajos y no reciben mucha luz
En las primeras etapas de crecimiento, una planta es lo suficientemente estrecha como para que la mayor parte del follaje reciba mucha luz solar. Empieza a podar tus plantas cuando empiecen a tomar una forma tupida, y remátalas para promover este crecimiento tupido.
A medida que una planta crece y se arbola, empezará a tomar una forma y a definir la copa. Esto te dará una idea de dónde crecerán los cogollos de calidad para que puedas empezar a podar las partes innecesarias de la planta.
Desde este punto hasta unas 3-4 semanas en la fase de floración, puedes podar activamente tus plantas. Una vez que esté bien entrada la fase de floración, debes dejar de podar, ya que puede hacer que la planta empiece a producir crecimiento vegetativo de nuevo, lo que disminuirá el tamaño y la calidad de tu producción.
Cómo podar tus plantas de cannabis
Agarra un par de tijeras de podar, normalmente unas Chikamasas o Fiskars, para trabajar rápidamente en las ramas y hojas pequeñas. Mantén un par adicional con más fuerza cerca para cortar las ramas más grandes.
Mantén tus tijeras afiladas y haz cortes limpios-esto mantendrá la planta sana y evitará infecciones y daños.
Amy Phung/Leafly
- Quita primero las ramas grandes. Esto te permitirá despejar todo el espacio posible antes de comenzar el trabajo más detallado. Empieza por las ramas de la parte inferior de la planta. Éstas no recibirán suficiente luz solar y nunca se convertirán en brotes completamente desarrollados.
- Corte las ramas que crecen en el centro de la planta, por debajo de la copa. Estas ramas quedarán a la sombra y tampoco desarrollarán cogollos completos.
- Pulsa cualquier rama u hoja pequeña o moribunda.
En los días siguientes a la poda, tus plantas deberían experimentar una explosión de crecimiento: el espacio abierto permitirá que llegue más luz a la planta.
La poda te permite controlar la planta y dirigir su energía. Recuerde que la poda es una gran oportunidad para estar presente en su jardín y observar cómo están sus plantas. Tómese este tiempo para observar también sus plantas y comprobar su estado general de salud, buscando plagas, deficiencias de nutrientes y problemas de suelo.