Sin la cadera, muchos de los movimientos que damos por sentado cada día no serían posibles. Las caderas son importantes para soportar nuestro peso, caminar, correr y dar estabilidad a nuestro cuerpo. Sin embargo, las caderas pueden lesionarse. A continuación se presentan cinco de las lesiones de cadera más comunes y sus síntomas.

Dislocación

Normalmente, la cabeza del fémur, o hueso del muslo, descansa en una cavidad en la pelvis, o hueso de la cadera. Cuando la cabeza del fémur se sale de esta cavidad, se denomina dislocación. Esto puede ocurrir como resultado de un traumatismo o accidente, como un accidente de coche o una caída. Los síntomas de la luxación de cadera incluyen dolor y problemas de movilidad. Si se producen daños en los nervios, también puede haber entumecimiento o falta de sensibilidad en el tobillo o el pie.

Fractura

Si se produce una rotura en el cuarto superior del hueso del muslo, o fémur, se denomina fractura de cadera. Esto suele ocurrir debido a una caída o a un impacto en la cadera, pero también puede ser el resultado de condiciones degenerativas, como la osteoporosis. Los síntomas de una fractura de cadera incluyen dolor en la ingle o en la zona exterior y superior del muslo, así como problemas de movimiento de la cadera.

Las distensiones

Las distensiones de cadera se producen cuando uno de los músculos de la cadera se estira o se desgarra. Esto suele ocurrir debido al uso excesivo, al estiramiento del músculo más allá de su capacidad, al recibir una caída o un impacto repentino, o al forzar repentinamente al músculo a soportar un peso inesperado. Los síntomas incluyen dolor, hinchazón y, a veces, pérdida de fuerza.

Bursitis

La bursitis se produce cuando se inflama la bursa, un pequeño saco lleno de líquido que amortigua los huesos en las articulaciones de todo el cuerpo. La bursitis de cadera se refiere especialmente a la inflamación de una de las bursas de la cadera. Puede estar causada por lesiones por uso excesivo, traumatismos, lesiones o afecciones degenerativas. La bursitis también puede estar causada por espolones óseos, artritis y otras afecciones. Los síntomas de la bursitis de cadera incluyen un dolor inicial agudo e intenso en la cadera que a menudo se convierte en un dolor intenso. Los síntomas suelen empeorar por la noche o con el uso de la cadera.

Osteoartritis

La osteoartritis es una de las formas más comunes de artritis, o inflamación de las articulaciones. Normalmente, los huesos que componen las articulaciones del cuerpo están cubiertos de cartílago articular, un material suave que permite que los huesos se deslicen fácilmente unos contra otros. La artrosis es lo que ocurre cuando el desgaste natural daña ese cartílago. Esta enfermedad es muy común y suele estar causada por el envejecimiento, el sobrepeso o una lesión que añade tensión a la articulación de la cadera. Los síntomas incluyen molestias, rigidez, espolones óseos, inflamación y movilidad dolorosa.

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