Durante la era de las camionetas de la generación 1973-79 de Ford, los Estados Unidos tuvieron dos escaseces de combustible inducidas por la OPEP, por lo que el ahorro de combustible fue una prioridad para sus nuevas camionetas para 1980. Fueron los primeros en la industria en tener en cuenta el peso más ligero junto con la aerodinámica en el estilo. Aunque seguía siendo una camioneta de tamaño normal, se adelgazó para incluir carrocería de acero de calibre más fino y vidrio. Esto produjo un camión enseñado, con un estilo limpio que, con el paso del tiempo, tiene un aspecto que ha envejecido bien. Aunque la mayoría de los motores de la generación anterior continuaron de 1979 a 1980, los V-8 más grandes migraron a los modelos F-250 y F-350 de mayor capacidad. El SuperCab opcional y los paquetes de niveles de acabado también continuaron sin cambios desde el Custom hasta el lujoso Lariat.

Para 1981, los F-100 añadieron un V-8 de 4,2 litros opcional. También era nuevo en los F-100 hasta los F-250 equipados con el V-8 302 una transmisión automática opcional de 4 velocidades con sobremarcha. Los primeros cambios de estilo se introdujeron en 1982. Las letras de imprenta «FORD» en el capó dieron paso a una parrilla ligeramente modificada con el logotipo ovalado azul de la empresa en el centro. Las líneas de acabado también se modificaron, pasando de Lariat XLT, XL, XLS, a Standard – de elegante a austero.

1983 fue un año importante para la serie F. El 4.2 V-8 demostró ser poco potente, incluso en el F-100 de dos ruedas motrices, por lo que se dejó de fabricar. En cuanto a la F-100, éste fue su último año, ya que las ventas de la F-150 habían aumentado considerablemente y presentaba una línea más unificada en comparación con la F-250 y la F-350. Para estos dos modelos, la introducción más importante de este año fue el V-8 diesel de 6,9 litros. Construido por International Harvester, inicialmente en exclusiva para Ford, este motor evolucionó hasta convertirse en el exitoso Power Stroke de 7,3 litros. Por último, el F-350 disponía ahora de una cabina doble de cuatro puertas en esta generación.

El rendimiento regresó en 1984, con una versión de 351 H.O. del V-8 Windsor como nueva opción. Los niveles de acabado se redujeron a tres, y se eliminó el XLS. En 1985 se introdujo la inyección electrónica de combustible para el 302 (ahora llamado 5.0 L). 1986 fue el último año de motores carburados para cualquier camión Ford. También fue el último año en que la serie F tuvo las aberturas de las ruedas cuadradas, ya que el nuevo estilo de 1987 introdujo las aberturas de las ruedas redondeadas.

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